Por más que escriba letras de amor, por más que intente remediar los errores cometidos, nada hará que vuelvas. Meda mucha pena tener que admitirlo pero es hora de dejarte partir, pero aun te quiero en mis recuerdos, en los últimos, los primeros cuando bebo vino, en los que salen cuando me viene la añoranza de la calle donde te conoci. Y que ahora solo te pueda ver y llamar como amigo. Al borde de mis últimas miradas, perdón si te quiero para mi último recuerdo, intento que seas lo último que viva y después, irme al carajo del infierno. Donde bien he de soportar extrañarte.
Donde bien he de soportar no tenerte.